(+34) 954 295 244
residencia.sv@micla.es
Como viene siendo habitual cada verano, y tal y como se recoge en la programación anual, un grupo de mayores de nuestra residencia de Granada, se traslada a la piscina municipal donde se realizan diferentes actividades acuáticas adaptadas a sus necesidades y capacidades.
En este taller de acuaterapia se trabaja con nuestros residentes en grupos reducidos y de forma individual con aquellos residentes que requieran tratamiento rehabilitador más específico.
Los beneficios de este tipo de ejercicios posibilitan que se trabajen cada uno de los músculos del cuerpo, aprovechando la modificación y los beneficios que el agua impone a su realización; es decir, traspasar al agua ejercicios de brazos, piernas, tronco, articulaciones y musculatura, gracias a las características de trabajar dentro del medio acuático. Así, los residentes, activan y fortalecen la musculatura, previniendo la atrofia muscular, mejorando la coordinación y el equilibrio, y una serie de movimientos como son los movimientos del andar, mejorar la movilidad de segmentos corporales, el empujar, y otros tipos de movimientos que suelen ser habituales en las actividades de la vida diaria del residente.
Junto a este tipo de ejercicios, la acuaterapia posibilita la aparición de efectos relajantes en los participantes, y a un incremento del bienestar general.
Esta iniciativa, está llevada a cabo por el fisioterapeuta y terapeuta ocupacional, el educador social y auxiliares, con los que se trata cada aspecto de este taller para optimizar los beneficios del mismo; ya que además de buscar el bienestar físico, se trata de optimizar la integración social, y de mejorar la calidad de vida de las personas mayores.
Los objetivos que aquí se proponen intentan abrir caminos hacia el disfrute de instalaciones fuera de la residencia y dentro del marco comunitario, participar del uso de dichas instalaciones, relacionarse con los miembros más cercanos de la comunidad, posibilitando una comunicación interpersonal con éstos, y activando las condiciones de una mayor participación en las diversas parcelas de la vida social de la persona mayor.
En definitiva, se trata de un programa orientado a cubrir las necesidades de nuestros residentes y con los que se están consiguiendo satisfactoriamente los objetivos propuestos.
