El 21 de enero, aprovechando los días de frío que venimos pasando, organizamos en nuestro taller de cocina una gran buñolada.
Entre cacharos, harina, azúcar y demás ingredientes, pasamos una tarde agradable en la que los más jóvenes aprendimos a elaborar una rica merienda de nuestros mayores y los no tan jóvenes recordaron otros momentos vividos.
¡Nos salieron “riquísimos”! y todos, residentes, familiares y trabajadores, pudimos disfrutar de tal manjar en una buena merienda de invierno.